jueves, 31 de mayo de 2012

PARÉNTESIS


Es conveniente hacer distancia de las tareas que siendo gratas nos van lastrando.
A veces no es posible pero cuando se puede siempre volvemos con más ilusión y  al tiempo más serenos.
Durante el tiempo que la escritura ha estado detenida, los pies han seguido caminando sin la presión de contarlo.
Las excursiones por La Calderona han hecho las delicias , semana a semana de algunas tardes de la primavera.
Ahora que las temperaturas van subiendo quizá serán más agradables los deportes del agua para relajar los obligados trotes semanales.
Aquí estoy de nuevo dispuesto a contar los altibajos de un proceso que dentro de tres semanas cumplirá un año y en el que pienso seguir como sabéis para..."moverme mientras pueda"

Los trotes se han establecido y regularizado en tres a la semana con duraciones que van entre los cuarenta y cincuenta minutos.
Fundamentalmente al atardecer o muy pronto por la mañana antes de que el calor se establezca definitivamente como amo y señor del día.

En cuanto a las excursiones por La Calderona, la subida al Garbí por las diversas vías ( cadenas o pedrera ) descendiendo por las canales alternativas, han ocupado nuestros esfuerzos en las ultimas semanas.

Desde allí el mar se divisa cara al verano como una autentica promesa refrescante en tanto que la sierra acusa ya los síntomas de la falta de lluvias que adolece nuestra región.
 
A punto como digo de cumplir las 52 semanas de trotes me he premiado para seguir en la brecha con unas nuevas zapatillas y una camiseta ( roja ) para mantener encendida la pasión del running.

Aquí estoy de nuevo con ganas de seguir para contarlo.