14/7/22
Reviso el último escrito y lleva fecha de enero del 2019.
Han pasado más de tres años desde mi última publicación en esta libreta virtual. El diario, el de papel, por qué soy de la época del plumín y el tintero, del tiralíneas y el raspado, ese si que no ha perdido día de anotaciones. Aquellas más privadas y espontáneas con el bolígrafo han mantenido su rutina cotidiana.
Me gusta escribir emociones, aquellas que “ el vivir procura” y mi subjetividad interpreta.
Con internet y las redes sociales la información se multiplica y percibes más que nunca el peso de tu mensaje : 1/ 8.000.000.000
Al tiempo, el Euro desciende y el calor aumenta en este Julio de 2022, el precio de la gasolina se duplica y nos “habituamos” a nuevas circunstancias. Desglobalización. Guerra entre guerras, como en Ucránia o bien operación especial, según se mire. Foco de nuestra atención desenfocada.
Mi mirada es llana, sufridora, escéptica, sobre estos y otros hechos sobre los que no tenemos ninguna capacidad individual de reacción. Aquí estoy en mi particular laberinto skineriano, inmóvil, recibiendo las descargas mediáticas con las que el poder me alecciona, me dirige, atemoriza o alegra.
Un gran experimento “cognitivo-conductual” de reclutamiento obligatorio y sin “ declaración de conflicto de intereses” .
De nuevo pues, asumiendo mi papel de “sujeto experimental” y dejando ingenuamente mis palabras como testimonio de reacción o inmovilidad.
Interesado como estoy en conocer “ lo que nos pasa por la cabeza “ , “ A causa de que “ , tengo mi propia ilustración y sujeto experimental. No os riais. Nos parecemos mucho.
Un fuerte abrazo