domingo, 4 de diciembre de 2016

DE LA INSTRUCCIÓN A LA DECONSTRUCCIÓN ( 2)


¡Hay que educar en valores! Esa  frase convertida bandera de nuestro tiempo, parece que sea la piedra filosofal de la educación.
¿ Pero que valores son esos, cuantos son y que jerarquía tienen en nuestro mundo mental ?
¿Existen realmente o son fruto de nuestras creencias ? ¿ Tienen un fundamento biológico ?

Dice Richard Dawkins en su libro " El espejismo de Dios " que los niños no nacen ni católicos, ni cristianos, ni hindúes, ni budistas, ni mahometanos y un largo etc.
También nos cuenta que cuando uno afirma que es ateo, le gusta preguntar si el ateísmo sobrevenido ha sido sobre alguna de estas religiones rechazadas, porque observa marcadas diferencias en sus códigos éticos finales.  El mundo se ha globalizado rápidamente, mucho antes de que los colectivos que lo formamos, esto que llamamos humanidad, haya encontrado ese conjunto de valores comunes que podamos compartir.



Estoy casi terminando de leer un libro que me está gustando mucho, se trata de " Tras las huellas de Herodoto ", del que su autor Antonio Penadés , acaricia redactar una segunda parte. En el, entre otras anécdotas refiere una que me parece muy relacionada con este mundo de valores al que intento acercarme.
Escribe Antonio Penadés, que Herodoto en un pasaje de su Historia explica que Darío quiso conocer como de diferente pensaban sus súbditos, y así fueron  preguntados los griegos cortesanos por cuanto dinero accederían a comerse los cadáveres de sus padres, estos le contestaron que por ningún precio. Seguidamente Darío pregunto a los indios Calatias que cuanto dinero costaría incinerar a los padres de este último colectivo y estos clamaron rogándole que no blasfemara, pues ellos se los comían.
Esta curiosa diferencia de costumbres, mucho más explicada y extensa en el libro de Antonio Penadés, me parece un buen ejemplo de la tarea descomunal a la que se enfrentan los educadores.


Tuve oportunidad de escuchar la opinión de expertos en la facultad de Geografia e Historia con ocasión de la presentación del audiovisual " La mirada de Sigfried " , un documental dirigido por Rosa Brines  con asesoría de Felix Vidal y que relataba Sigfried con sus recuerdos, un niño superviviente de un campo de concentración Nazi que fue acogido por un prisionero español.
La mesa redonda que siguió,  protagonizada por conocedores de la materia, hizo elogios de la experiencia personal de Sigfried como tema de partida para comprender el "Holocausto" y las enseñanzas que se pueden derivar de estos padecimientos para no repetirlos.


Un nutrido grupo de personas con gran experiencia en la materia, para finalmente acuñar una frase que alguno de los ponentes recordó:
" España es un país con muchísima formación y poco cambio ".
Una nueva sesión quizá más operativa tendrá lugar a mediados de diciembre en el IES Benlliure , a la que tuve la suerte de ser invitado.
Quizá entonces las nubes de mi duda se disipen y también los otros holocaustos tengan su minuto de reflexión para re-ordenar esa jerarquía de valores tan diversa y que necesitamos para educar en el respeto hacia los demás a las generaciones venideras.